El albúm de Gonzalo del Val junto a Valentina Marentes, Paquito Cruz, Luis Giménez y Benjamín García reúne temas de la tradición musical mexicana transformados con pinceladas jazzísticas
El baterista mirandés se une a la veracruzana Valentina Marentes en una entrega que honra la tradición mexicana. Temas como Deja que salga la luna y Farolito dejan al descubierto las infinitas posibilidades del jazz y la riqueza de los sonidos latinoamericanos.
Con una formación que va desde Luis Giménez en la guitarra, Benjamín García en el contrabajo y Paquito Cruz al piano, Lamentos Mestizos constituye una experiencia sonora digna de reconocimiento por la búsqueda de realce de las raíces musicales mexicanas. La voz cálida y sutil de Valentina resignifica la poética de los «lamentos», sin duda, un gran acierto en el viaje a otras tierras que representa la producción discográfica.
Alma de Veracruz, de la autoría de Gonzalo retrata la visión sobre la que se produce el disco. El piano prepara una atmósfera tranquila que se complementa con la intervención del saxofón tenor, -en este caso- el narrador de los «lamentos», acompañado por el pizzicato del contrabajo que proyecta una «presencia» reafirmada en la batería.
La producción del disco también está a cargo de Gonzalo del Val, con el apoyo del sello discográfico Segell Microscopi. El álbum en su totalidad representa un recorrido por un repertorio de recuerdos que evocan nostalgia, y a la vez un inmenso respeto por la audacia con que estos músicos expanden las raíces de un país, a través de un ejercicio de fusión muy bien logrado.
