Marco Rottoli Trio: Diálogos en la bruma de una noche de fin de año

Simone Daclon, Marco Rottoli & Pasquale Fiore
©Andrea Candeloro

Texto por José Valderrama / Fotografías de Andrea Candeloro, Gianluca Pavarini y Humberto Amesquita

El contrabajista italiano Marco Rottoli se estrena como líder de sesión en New Year’s Eve. Junto al mencionado encontramos a sus compatriotas Simone Daclon y Pasquale Fiore, piano y batería respectivamente. El total del trabajo, que no llega a los cuarenta minutos de duración, está formado por ocho temas en total. De estos, cinco son composiciones del mismo Rottoli, véase Acacia, New Year’s Eve, Snowball, Walking Through e Ilusion. Los otros tres son So beats my heart for you una composición de Charles Henderson, Pat Ballard y el pianista Tom Waring, Chloe compuesto por Gus Kahn y Neil Moret, ambas composiciones de jazz de los años treinta, y Bye-Ya, composición del carismático pianista Thelonious Monk.

La portada del disco muestra un edificio de oficinas sumergido en un océano de bruma, la humedad hace que los fluorescentes brillen con una luz azul tenue. La fotografía resulta un engaño, una trampa. Uno pudiera pensar que realmente está viendo la construcción, pero no es así, la imagen únicamente refleja la luz de las lámparas de oficina, que se encuentran completamente vacías. Tal vez sea la víspera de año nuevo. Un bloque de oficinas y luces fluorescentes, la imagen resulta cotidiana, neutra y conocida, podría ser el paisaje nocturno de cualquier ciudad. Con la música de New Year’s Eve pasa algo parecido. Quien la escuche encontrara características y una sonoridad que puede resultarle conocido a cualquier iniciado en el jazz. Sin embargo, vuelve a ser un engaño, pues, al igual que quien ve la fotografía sabe que no es el edificio de su ciudad, quien escuché el trabajo de Marco Rottoli Trio encontrará aquello que lo hace único.

©Gianluca Pavarini

El formato de trio piano-contrabajo-batería se ha explotado de diferentes maneras desde su codificación en el jazz moderno de mano de Bud Powell, allá por el final de la década de los cuarenta. Pero tal vez a la que más remite este trabajo es a la formación del Bill Evans Trio. Por una parte, por el tratamiento de la melodía en cada una de las composiciones de Rottoli. Generalmente la melodía se ve absorbida por las disposiciones de acordes del pianista, por lo que, la melodía salta y se sumerge en la armonía. Por otra parte, también evoca al famoso trio mencionado por la atmósfera y estilo del disco, se sitúa dentro de una atmósfera meditativa con sonoridades propias del jazz de los años cincuenta y sesenta.

Aún con esto, New Year’s Eve cuenta con un carácter personal que destaca por seguir una línea tradicional, pero con un replanteamiento claro en cuanto a la importancia de la armonía sobre la melodía en las composiciones como indicábamos anteriormente. Marco Rottoli Trio se posiciona en una línea fuera de grandes explosiones dinámicas y sin necesidad de “tocar fuera”, como se dice en el argot de los músicos. Es un disco grabado y tocado con gusto y sencillez. La música tiene espacio para respirar, se puede escuchar como se desvanece cada nota musical. Esto resulta en una estética suave, sin tratarse de una calificación peyorativa, que hace que el disco pueda ser disfrutado por cualquier tipo de oyente.

©Humberto Amesquita

La agrupación esta perfectamente cohesionada, a pesar de esto hay ciertos momentos en los que por microfonía se cuela lo que parecen murmullos de diálogos rápidos, o tal vez sean solo respiraciones. Es un detalle que, juntamente con esas respiraciones profundas y explícitas, hace que la música suene increíblemente orgánica, próxima y real. A veces la tarea de estudio resulta en que el oyente recibe cápsulas extirpadas de los músicos que la interpretan, uno ya no sabría si hace falta soplar para hacer sonar un saxofón o si este tiene llaves. En el escenario hay comunicación verbal en muchas ocasiones; que se plasme esta comunicación en el estudio de grabación debería ser algo más habitual por el valor humano que le da a la música.

Resumiendo, New Year’s Eve resulta ser un muy buen disco apto para cualquier tipo de oyente y público, especialmente para aquellos con un gusto más tradicional lejos de sonoridades más «agresivas». Jazz para disfrutar en un club mientras fuera la ciudad se inunda en una bruma y las oficinas se vacían. Por desgracia, en el momento que estamos viviendo tendremos que disfrutar de la propuesta de Marco Rottoli Trio en casa, siendo también una excelente opción.

Si deseas escuchar New Year’s Eve pincha en este enlace

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